La dinastía de estos reyes sucede a la época merovingia (nombre derivado del rey Meroveo). El más destacado monarca carolingio fue Carlomagno.
Los carolingios forman la segunda dinastía nacional francesa, y su primer rey fue Pipino de Heristal, que luchó contra los frisones, bávaros y sajones.
Su hijo Carlos Martel le sucedió en el trono y se destacó por sus expediciones contra los germanos y contra los árabes. Carlos Martel gobernó de hecho desde el año 714 al 741. Como hemos visto, derrotó a los árabes en Poitiers en el año 732. Por su valentía y arrojo, el Papa Gregorio III requirió sus servicios para hacer frente a la invasión lombarda. Martel murió antes de prestar esta ayuda, en el 741.
Sus dos hijos, Carlomán y Pipino el Breve, se hicieron cargo del reino.
Carlomán dedicóse a estudios monásticos, y Pipino asumió el poder como primer rey carolingio.
Pipino el Breve, obedeciendo la costumbre franca de los repartos, antes de morir determinó que sus hijos Carlos y Carlomán se repartieran el poder.
Al poco tiempo muere Carlomán y se evita la división del territorio en dos reinos, quedando Carlos como único monarca.
Carlos, apellidado el Grande o Carlomagno, comienza así, en el año 768, un reinado que revistió históricamente una trascendental importancia.
Fuente: Historia Blas Barisani Link
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